En los últimos días ha llegado la prueba de fuego para la afición colombiana, aquella a la que le encanta estar en las tribunas apoyando sin cesar a los deportistas nacionales en los mejores espectáculos; también para aquella que es fanática de vivir la pasión por un escudo o una bandera desde casa; y por supuesto para los que no se identifican con ninguna de las dos anteriores, pero que dicen ser hinchas y fieles seguidores en este caso, de todo lo que represente a Colombia.
Y es que, en ciudades como Cali y Bogotá, se ha cumplido a nivel taquillero con eventos como el Campeonato Sudamericano Sub-20 de fútbol, reuniendo en sus escenarios a un promedio de 20.000 personas por partido y demostrando la jerarquía del país anfitrión. O es el caso del municipio de Cota, que también cumplió con la asistencia a los clasificatorios de la Copa Davis, conocida como “mundial de tenis” en el deporte blanco.
Tres territorios, dos contextos, e incluso, dos deportes diferentes, pero todo enlazado para un solo fin, que en las gradas se escuche al unísono el cántico “Vamos Colombia”. Sin embargo, más que la alegría por ese orgullo patrio desbordado, se han generado una serie de discusiones por decidir cuál debería ser la sede principal o la casa de la Selección Colombia.
Claro está que el combinado tricolor ha jugado como local en Barranquilla desde hace más de una década, y que allí se ha logrado la gesta de clasificar a dos Copas del Mundo, aunque esa “magia” del estadio Metropolitano se ha ido perdiendo. ¿De quién es la culpa? ¿De los jugadores que con su pésimo nivel deportivo solo pudieron ganar tres partidos en las eliminatorias mundialistas? ¿O de los que llegan a todo menos a alentar a una selección en un partido clave para su futuro? Y en el caso del tenis, así no se haya logrado la victoria de la serie ante Gran Bretaña, ¿Se debe seguir contando con la capital y sus alrededores para dichos torneos? ¿O es la “sucursal del cielo” la encargada de recibir a los y las deportistas con mejores clasificaciones en ranking ATP/WTA del planeta?
Muchas preguntas y también muchas respuestas figuran hoy entre el público, y la respuesta debe ser muy sencilla. Colombia es local en su territorio, comprendido entre 1.140 millones de kilómetros cuadrados; no importa la ciudad, el departamento o el municipio, sea en el lugar donde se decida, allí debe hacerse presente la hinchada y se debe garantizar que por lo menos, desde lo anímico, se va a tener una victoria asegurada. Así, en lugar de buscar más excusas, culpas o disgustos, podemos preocuparnos por llenar las graderías para que el “sí, sí Colombia” nos una y no nos siga dividiendo como región.
Esta es la primera igualdad en esta fase del fútbol profesional colombiano este semestre.
La peor derrota del 'León' desde la llegada el técnico Pablo Peirano.
El conjunto 'Embajador' inició con pie derecho la recta final del campeonato.
Comienza la definición del nuevo campeón del torneo de canteras. La Supercopa Juvenil FCF 2024…
Emocionante partido entre la ‘Canarinha’ y los 'Charrúas'.
La 'Albiceleste' sigue marcando el paso en las Eliminatorias Sudamericanas.
Esta web usa cookies.