Histórica temporada del Bayer Leverkusen.
En el Estadio Olímpico de Berlín, Bayer Leverkusen enfrentó al Kaiserslautern en la Final de la Copa de Alemania. El partido tuvo como resultado victoria para los dirigidos por Xabi Alonso por 1-0, recuperándose de la derrota en la Final de la UEFA Europa League por 3-0 contra el Atalanta donde también perdió su invicto de 51 partidos y firmando una histórica temporada con un doblete.
Partido que en su primera parte tuvo el completo dominio del actual campeón de la Bundesliga, con un excelente traslado del balón, presión intensa en campo contrario y sumando muchos jugadores en ataque, mientras que el Kaiserslautern, buscaba mantener el cero en su arco, con un bloque defensivo muy bajo y casi que renunciando a la tenencia del balón.
Corría el minuto 17′ cuando el Bayer Leverkusen se fue adelante en el marcador por intermedio del suizo Granit Xhaka, que con un remate de primera intención desde afuera del área, clavó el balón en el ángulo superior derecho del arquero Julian Krahl.
Sobre el minuto 44‘, el juez central Bastian Dankert expulsó por doble amarilla al defensa del Bayer Leverkusen Odilon Kossounou por doble amarilla, dejando a los dirigidos por Xabi Alonso con un jugador menos para toda la segunda parte.
En la segunda mitad, el Kaiserslautern aprovechando el hombre de más, fue en búsqueda del empate, manejando la posesión del balón y buscando hacer daño desde ataques dinámicos por las bandas. El Bayer Leverkusen, replegó sus líneas priorizando la seguridad defensiva, atacando los espacios que dejaba el equipo de segunda división alemana cuando atacaba.
El delantero del Kaiserslautern, Ragnar Ache con un potente remate exigió al arquero Lukáš Hrádecký, que con una gran atajada impidió el empate en el compromiso (63′). Sobre el minuto 75′, Jeremie Frimpong, tuvo el 2-0 en sus pies después de un contragolpe, el extremo holandés quedó mano a mano con el arquero Krahl, lo dejó en el camino con un gran enganche e increíblemente cuando tenía para rematar al arco, decidió dar un pase al medio, entregándole el balón a la defensa del Kaiserslautern.
A pesar de que ambos equipos tuvieron acciones claras de gol, el marcador no se movió más y el Bayer Leverkusen ganó el partido y se quedó con la Copa de Alemania por 1-0.
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Con este resultado, Bayer Leverkusen se consagró campeón de la Copa de Alemania por segunda vez en su historia, después del título de la temporada 1992/1993 y firmó un histórico doblete, tras haberse consagrado como campeón invicto en la Bundesliga.
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