Foto: Juan Galindo - Rotonda Deportiva
Es el primer DT venezolano en ser campeón con dos equipos diferentes en Colombia.
Rafael Dudamel es el director técnico que logró algo que parecía imposible durante los 75 años anteriores, sacar campeón al Atlético Bucaramanga, el último de los clubes tradicionales del fútbol profesional colombiano que no había alcanzado una estrella.
En su trayectoria como futbolista fue apodado como ‘San’ Rafael Dudamel por sus atajadas clave en Independiente Santa Fe, club al que finalmente terminó privando de la oportunidad de ganar la décima estrella en la noche de este 15 de junio que se marca para siempre en la historia del equipo ‘Leopardo’.
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En su carrera como entrenador, Dudamel hizo historia con la Selección Sub-20 de Venezuela al llevarla a la Final de la Copa Mundial Sub-20 de 2017 con prospectos que con el tiempo se consolidaron como Wuilker Fariñez, Yangel Herrera, Yeferson Soteldo, entre otros.
Su regreso a Colombia se dio en 2020 para ser comentarista invitado del Gol Caracol en las eliminatorias al Mundial de Catar 2022, rol en el que se siguió desempeñando mientras fue técnico del Deportivo Cali entre 2021 y 2022, llevando al ‘Azucarero’ a su décima estrella en el Torneo Finalización con Teo Gutiérrez como figura.
Los caminos de Rafael Dudamel y Atlético Bucaramanga se cruzaron en el segundo semestre de 2023, siendo nombrado el 1° de diciembre tras una negociación que no fue sencilla para los directivos del equipo ‘Leopardo’.
Dudamel formó un grupo humano enfocado en el orden y trabajo mental, tal como dijo en una entrevista con Los Informantes hace un par de semanas, lo cual se vio reflejado no solo en los tiros penales decisivos en El Campín, también por la forma en que potenció jugadores ‘desahuciados’ de otros equipos como Carlos Henao, Freddy Hinestroza, Fabián Sambueza y el mismo Aldair Quintana.
¡Salud, campeón! Ahora sí, Rafael Dudamel puede decir de nuevo «disfruto, disfruto», por quedar inscrito por siempre en la historia del equipo de la ‘Ciudad Bonita’ que merecía este tipo de celebración, hasta que por fin un ‘santo’ llegó a orientar el barco hacia el puerto de los campeones.
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