La superioridad del Brasileirao y la Liga Argentina en Sudamericana es indiscutible, a razón de los resultados en las competencias de clubes del continente.
El historial de las últimas diez ediciones de la Libertadores es abrumador. Seis títulos brasileños, tres argentinos y solo uno –Atlético Nacional en 2016– obtenido por un club de una liga diferente a las dos potencias de Conmebol, son la muestra de una hegemonía contundente.
La otra ‘Mitad de la Gloria’ mantiene en parte la tendencia, aunque más inclinada hacia el río de La Plata. Cuatro títulos para equipos argentinos y tres para brasileños evidencian la superioridad de las dos ligas frente al resto. Independiente del Valle en dos oportunidades e Independiente Santa Fe, fueron los únicos en romper esta ‘paternidad’ en las últimas diez Copa Sudamericanas disputadas.
Aunque la actualidad del fútbol colombiano -y de la mayoría de las ligas sudamericanas- continúan mostrando un nivel inferior frente a Brasil y Argentina, el primer objetivo de varios clubes es el intentar llegar más lejos y superar las respectivas fases de grupos para intentar colarse en los puestos más altos de ambas Copas.
El que quiere ser campeón debe ganarle al que sea, dirán algunos. Sin embargo, no es un secreto que hay caminos más fáciles que otros para llegar a un destino y es aquí cuando los sorteos toman protagonismo.
Aunque muchos soñamos con nuevas victorias del fútbol colombiano, la objetividad obliga a aterrizar. En este deporte -y más el moderno- cualquiera puede derrotar al rival más complicado, pero las posibilidades, más allá de la estadística, también pasan por el nivel de nuestros equipos.
A pesar de lo anterior, no solo el proceso propio asegura un triunfo o una derrota. Las balotas tienen parte en el juego y en muchas ocasiones hemos sido testigos de equipos que han podido llegar más lejos que otros, teniendo un nivel menor pero una mejor suerte.
Los clubes colombianos después del sorteo de los grupos de las competencias sudamericanas quedaron en posiciones tan dispares, que parecen sacadas de una cinta de Sergio Leone.
Estos son los tres escenarios que afrontaran en el papel los seis equipos del rentado nacional en la búsqueda del sueño continental.
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El bueno
El mayor beneficiado en Copa Libertadores es Atlético Nacional. De todos los escenarios posibles, por nombres, está en el grupo más asequible. Su mayor rival será Olimpia, Campeón del Torneo Clausura paraguayo. Melgar -subcampeón peruano- complementa el grupo junto a Patronato, que con orgullo ostenta el trofeo como campeón de Copa Argentina, aunque pertenece a la segunda división del futbol gaucho. En esta serie, no avanzar a Octavos de Final sería un fracaso para el cuadro verdolaga.
Independiente Santa Fe por su parte, fue el más favorecido en Copa Sudamericana. Sus tres rivales: Universitario, Gimnasia y Esgrima de La Plata, y Goiás, en cuanto a historial en la competición y las posiciones con las que finalizaron el año pasado, no lucen igual de fuertes que otros equipos que compiten en el torneo. Los cardenales cuentan con una posición favorable para clasificar directos o en los play-offs a los Octavos de Final.
El malo
Independiente Medellín logró su cupo por medio del sistema de fases previas y queda sembrado en una zona bastante complicada en Libertadores. El campeón uruguayo – Nacional- y el subcampeón brasileño -Internacional de Portalegre- parten como los favoritos para avanzar. El campeón de Venezuela -Metropolitanos- completa un grupo que no pinta fácil para el poderoso.
Deportes Tolima tuvo una suerte similar en Sudamericana. Enfrentar en el mismo grupo al actual subcampeón -Sao Paulo – no deja de inquietar a un club que tuvo una muy mala experiencia en su última visita a Brasil. Tigre de Argentina tampoco es un rival para mirar por encima del hombro. La Academia Puerto Cabello es el otro rival del ‘pijao’.
El feo
La hazaña del Deportivo Pereira el año pasado, lo lleva a su primera participación en Copa Libertadores. La sensación de no ser el favorito no es novedad para el ‘matecaña’, pero las balotas no fueron amables para el Campeón Colombiano. Boca Juniors y Colo-Colo, además de ser los campeones vigentes de sus respectivos países, cuentan con una trayectoria que los coloca como favoritos. El subcampeón venezolano – Monagas- parece el rival a vencer para alcanzar la tercera casilla del grupo que le permita ser transferido a Sudamericana.
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Millonarios parece predestinado a tener sorteos horribles. Aunque no parte como el candidato a terminar en la ultima posición de su zona, el ‘ballet azul’ deberá buscar su cupo en el grupo más difícil de esta fase de la Copa Sudamericana. Un histórico como Peñarol -semifinalista en 2021- no deja de ser un rival con pergaminos, Defensa y Justicia hace 3 años se alzó con este trofeo y no se muestra como un rival fácil. El grupo lo completa el América Mineiro. Una verdadera prueba de fuego para el proceso de Alberto Gamero.
La próxima semana iniciará el camino de los seis equipos, más allá de lo aparentemente sencillo o complejo que resultaron sus emparejamientos, todos deben tener en su mente el sacudirse de las malas presentaciones recientes del fútbol colombiano y de los complejos. Sin un salto de nivel y actitud, difícilmente se logrará una participación destacada como la de Atlético Nacional e Independiente Santa Fe – por citar los triunfos más cercanos-, cuando lograron colocar la bandera colombiana en la cima del continente.
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